El sector ferroviario, ha avanzado significativamente en los últimos años, en los que se ha aumentado considerablemente tanto el confort como la seguridad de los pasajeros. Para conseguir estos avances, este sector requiere de estructuras ligeras, con alta resistencia a la fatiga, con alta resistencia al fuego y un buen aislamiento tanto acústico como ambiental.

Es aquí donde los materiales compuestos cobran especial protagonismo, debido a su extraordinaria relación resistencia-densidad, y alta resistencia al fuego, permitiendo de este modo reducir considerablemente el peso tanto en aplicaciones estructurales como no estructurales, aumentando la seguridad y reduciendo los costes tanto de consumo de combustible, como de mantenimiento.